Etapa 3: Gare Ksar Sghir - Chefchaouen - Volubilis - Mulay Idrís

Despues de volver de cenar tomamos algo en el bar del hostal. Hablamos con el dueño y le preguntamos donde podiamos dejar las motos, ya que nos daba palo dejarlas en la calle.

El hombre nos dejo meterlas dentro del bar, una vez que los parroquianos se habian ido del bar.

Al dia siguiente nos levantamos pronto y tras lavarnos y vestirnos emprendimos camino a desayunar, ya que en el hostal no daban desayunos.

Aprovechamos para hacernos unas fotos con el dueño, un tio la mar de simpatico y agradable.

Deshacemos el camino del día anterior, volvemos a pasar por Tanger-Med, el desvio a Ceuta y enfilamos la carretera hacia Tetuan donde cogemos la autopista, que si mal no recuerdo cuesta 1 euro, no recuerdo los kilometros que son, pero si que aceptan euros en el control de pago.

Durante el recorrido nos vamos alejando mas de la costa y mas hacia tierra adentro al valle del rif. Si bien al principio Marruecos puede parecer desertico, en cuanto se llega al valle del rif el paisaje cambia por un verde asturiano y las vistas son muy hermosas.

Sin dejar de deleitarnos con los nuevos paisajes nos vamos aproximando a Chefchaouen. Hicimos una parada a la entrada del purblo donde haboia un puesto de ceramica marroqui, concretamente para hacer tajine.

 Llegamos a Chefchaouen y es dia de mercado, mucho trajin y trafico, hasta que llegamos a un parking en lo que parece el centro de la ciudad, creo que es la plaza del mercado. El parking es privado,  al aire libre. Dejamos las motos y los cascos ya que esta vigilado para ir a dar una vuelta por la Medina. El precio es de un euro por moto, en nuestro caso innegociable.

Atravesamos hasta la entrada de la medina despues de intentar esquivar a un monton de vendedores, limpiazapatos, buscavidas, etc. Estamos un tanto inquietos porque no conocemos el terreno y no sabemos que nos puede pasar, sentimos la desconfianza propia del viajero que esta fuera de su pais.

Al final picamos y compramos algo. Concretamente una de las costumbre, probablemente mas sanas (no se si mas higienicas) que es tomarse un zumo de naranja recien exprimido por un vendedor en la calle.

El vendedor disponde de un exprimidor de aluminio, unos vasos, un saco de naranjas de Marruecos y una palangana con agua donde residen los vasos, que son de un tamaño aproximado de un tercio. Te corta las naranjas y te las exprime delante de ti, coge un vaso y te va echando el zumo. Creo que nunca lo he tomado tan fesco. Una vez que has bebido, le devuelves el vaso, el le quita las babas dentro del agua y ala, a por otro jajajajajaja. Si eres muy tikismikis mejor no lo pidas, pero es una saludable aportacion para la hora o hora y media de andar por la Medina.

Entramos por una de las puertas que dan a La Madina, es la primera vez que entro a una. Supone retroceder 500 años. El tiempo automaticamente se ralentiza y entras en un mundo diferente gobernado por las especias y los frutos secos,las tiendas de comerciantes, la gente que pasa a tu alrededor vestida con sus tunicas, las mujeres tapadas y con velo. En fin, miles de controversias alli son naturales y al volver a España me ha hecho entender mejor algunos conceptos de la cultura marroqui.

 Compramos frutos secos, lo que antiguamente en España era un cucurucho, solo que por lo que cuesta una bolsita de aqui alli te llevas medio kilo. estan buenisimos, hechos de manera artesanal, pufdimos ver como tostaban las almendras.

Al llegar a la mitad de la medina veo una peluqueria. Uno de mis sueños era raparme el pelo y afeitarme a navaja. Les pido a mis compañeros que sigan sin mi, ya que aunque no lo llevo muy largo me molesta. El peluquero no habla español ni ingles, solo arabe y frances pero me entiende cuando por señas le digo que todo fuera.

Mis compañeros ya estan arriba del todo, asi que aprovecho para comprar unas postales, ya que desconozco cual sera la proxima ciudad con correos.

Llegamos a la parte superior de la Medina, hay varias mezquitas, en una de ellas estan con el rezo creo que del mediodia, la gente es muy religiosa y respetuosa de la religion, te avisan con educacion si puedes entrar o pasar por un sitio determinado reservado para fieles musulmanes, no como aqui que la gente entra a las iglesias en cualquier momento sin respetar a los fieles ni las indicaciones de los carteles.

Aparte de las tiendas hay numerosos restaurantes con toda la gastronomia de Marruecos y de la zona. Estan bien de precio, son mas para turistas, yo os recomendaria, si vais con tiempo que en la parte de abajo de la Medina busqueis alguno de los que van la gente de paso, son menos bonitos y menos comodos pero me paecieron más autenticos. Os adelanto que la comida es al estilo de alli, por lo que a lo mejor no os sabe igual que aqui, que esta mas al estilo de la cocina española.  

Volvemos a bajar hacia la zona comercial de la Medina, donde hay unas calles que la atraviesan donde hay numerosos locales con productos tipicos de artesania y cuero de marruecos. Como todavia tenemos mucho viaje por delante, hacemos un par de compras rapidas y salimos de la Medina. Yo me hice con una especie de gaita o dulzaina, segun el vendedor tipica marroqui, fabricada por un artesano milenario, con una madera delicadisima, etc,etc. En mi opinion una baratija, pero que iba a quedar muy bonita en mi salon por los 20 euros que me costo.

Enfrente de la Medina esta la oficina de Correos, desde donde envie unas postales a la familia y amigos. Nada mas entrar hay sentado una especie de ujier, un señor mayor con un uniforme azul el cual me dice en frances que que deseo, el enseño las postales y me pide el dinero. Como no se que hacer y tengo prisa por mis compis se lo doy y se queda con las cartas y me dice por señas que me marche.

Todo el mundo me mira como si fura un estupido turista al que han engañado y yo lo se, me preocupa que no lleguen las postales. Pero si, al final llegaron y en tiempo record. Las oficinas son como aqui en España, quitando al abuelillo este, claro.

Bajamos al parking, todo esta en su sitio y perfectamente vigilado. Pagamos y nos vamos camino a Volubilis. Estamos cada vez más cerca del desierto.

Hay un antes y un despues de Chefchaouen. A ver si consigo explicarlo, es como que es la ultima ciudad antes de entrar en otra dimension inimaginable para el viajero. Segun vamos avanzando hacia Meknes, la carretera y las ciudades no dejan de impresionarnos, no estabamos preparados para este catalogo de imagenes que no figura en ninguna guia de turismo de Marruecos. Es otra vida, otro pais, otro continente, es la percepción de que lo verdadero aun existe, y de que hay gente que el tener la ultima version del ipad le importa un pito. En resumen, se acabo el turismo y empieza el autentico viaje.

Una puntualización: llevo un mapa michelin de Marruecos en la bolsa sobre deposito y un TOMTOM One con el mapa de Marruecos en mi opinión 100% fiable (siempre que llevas la ultima actualizacion), sobre todo apara ampliar el detalle del Michelin. En este mapa vienen ademas de las carreteras principales, todas las secundarias y la mayoria de las pistas. El unico problema del TOMTOM es introducir el nombre de la ciudad ya que varia bastante, una vez que te acostumbras no hay problema.

De camino a Meknes paramos a echar gasolina, importante recordaros que no aceptan tarjetas de credito y que el precio de la gasolina es casi la mitad que en España.

 
Aprovechamos para hacer una paradita y tomar un refresco antes de seguir. Observo que la mayoria de los vehiculos que pasan son muy antiguos y los burros, desparecidos desde hace decadas de los campos de España, aqui se utilizan como vehiculo principal, me recuerdan a mi abuelo y a mi tio en Asturias cuando yo era muy pequeño.

Segumos hasta Volubilis, esta bastante bien indicado. Los europeos estamos muy mal acostumbrados, no espereis una entrada a lo "grande" sino una taquilla modesta con un paisano sentado que te ofrecera por 1 euro la entrada y que contrates un guia. Nosotros no lo contratamos, pero si vuelvo lo hare y de hecho lo recomiendo.

Son minimo dos horas recorriendo una ciudad romana que por el clima africano esta perfectamente conservada, sin azafatas y sin tiendas de camisetas y souvenirs, sencillamente puedes verlo todo a tu bola.

La visita en Volubilis se alarga y decidimos dormir en Mulay Idris en lugar de en Maknes, ya que tenemosm pactado no circular de noche.

Os aconsejo que lo hagais asi, no reserveis nada ni os marqueis rutas imposibles, simplemente dejaos llevar por el destino, en eso consiste la aventura. Relajaos, dejaos llevar y recordad el dicho marroqui: prosa mata ¡¡.

Preguntamos al taquillero de la entrada y ¡¡¡ que suerte tuvimos ¡¡¡. Tenia un primo que tenia una albergue (pension) en Mulay Idris. Llama a su primo por el movil (en todo Marruecos hay cobertura y ademas es muy barato) y quedamos con el a la entrada de Mulay Idris, donde se encuentra la parada de autobuses y taxis.

Previamente habiamos pedido que el parking fuera cerrado, cuando llegamos alli, el parking era de la pension pero en plena calle, cerrado con un candado. Nos disponemos a irnos ya con el tio delante pero nos tranquiliza ya que hay un vigiulante que nos cobrara un euro por moto toda la noche y solo tenemos que pagarle al dia siguiente. El tio viene, se sienta enfrente de las motos y asi le encontramos al dia siguiente.

El albuergue como lo llaman alli es una pension muy limpia y con agua caliente, el dueño nos muestra los exquisitos modales que tienen todos los marroquies con los extranjeros. Nos pegamos una ducha rapida y nos vamos  a dar una vuelta.

Mulay Idris me fascino, deberia ser una visita obligatoria de cualquier persona que visite Marruecos.  Es el sitio donde uno debe perderse de vez en cuando para volver a encontrarse con uno mismo.

Mientras atravesamos andando Mulay Idris y nos vamos aproximando al centro se nos acerca un cahval joven, que se nos ofrece como guia. Nos lleva a varios sitios, en uno de ellos, en la parte antigua coincidimos con unos valencianos que estaban alli de vacaciones, aunque a mi me parecio que estaban de "negocios" no muy legales.

Un poco acojonados porque estabamos bastante lejos de España, en una ciudad que no teniamos planeada y que nos embujaba a cada uno con su hechizo y que segun se iba haciendo mas tarde y mas tarde mas ganas teniamos de caminar y perdernos por ella, finalmente decidimos ir al centro y comer en un tenderete de carnes habitual en Marruecos.

Estos tenderetes consisten en pinchos morunos de cordero o tajin de poolo/cordero, pocos platos mas podras pedir. En todos hay Coca Cola y agua embotellada. Lo hacen delante de ti, tanto la mezcla de las carnes y las verduras como el asado en carbon. Simplemente eliges lo que quieres y el tio te lo hace.

Tambien te hacen una especie de ensaladas y el pan es parecido al que ponen en los restaurantes indios, similar a una torta, que esta buenisimo.

 Despues de cenar nos acercamos hasta un cafe en el que solo habia hombres. Las mujeres es costumbre que no frecuenten los bares ni cafeterias, ya que es una sociedad muy machista. Pedimos te moruno, ya que solo sirven cafe, te e infusiones y refrescos o zumos. El alcohol esta prohibido en la gran mayoria de establecimientos (es un pais islamista), ademas de ser muy caro.

 Al día siguiente desayunamos en la parte superior del albergue, desde donde admiramos la parte alta de Mulay Idris y nos preparamos para nuestra siguiente ruta hacia la puerta del desierto.

Etapa 2: Ceuta - Tangermed- Gare Ksar Sghir

Bajamos del Ferry y llegamos a la frontera, donde la guardia civil nos indica que sigamos y asi llegamos a la salida del puerto, justo enfrente de un cartel de 'Bienvenidos a Ceuta'.




Recuerdo la sensación que me inundo en ese momento, me parecia increible que yo hubiese llegado tan lejos, en moto, y sentí un vacio en el pecho por no poder compartirlo con Virginia y César.

Hijo mio, te prometo que algun dia lo haremos juntos en moto.

Avanzamos por la avenida principal de entrada a Ceuta, al fondo se aprecia Ceuta, a nuestra izquierda el mar y a lo lejos la costa española. Pienso la de gente que ha muerto atravesando el estrecho en patera, se ven las corrientes en alta mar, al fono a lo lejos, que son muy peligrosas.

Llegamos a la rotonda de acceso al centro de la ciudad y decidimos seguir hasta el final por la avenida de la Marina Española. Finalmente, tras recorrer unos kilometros decidimos dar la vuelta, tenemos hambre y queremos dar una vuelta por Ceuta antes de ir a TangerMed.

Ceuta es una ciudad militar española, digo esto de militar española porque se nota en los edificios, estatuas, nombre de las calles la presencia de los militares en esta ciudad. Vas caminando por la calle y te encuentras chicas españolas vestidas y tapadas al estilo arabe que se cruzan con militares de uniforme.

La arquitectura es como la de cualquier ciudad española, solo que el espacio esta mucho mas aprovechado, me gusta mas que Gibraltar. Se nota que la mayoria de las construcciones son del siglo XIX-XX, que es cuando mayor auge debia de tener la ciudad.

Damos la vuelta, enfilamos por la rotonda y aparcamos en una calle del centro. Vamos andando hacia una zona que hay muchas tiendas de indios y encontramos un bar de platos combinados. No sentamos y nos atiende un joven con aspecto arabe pero habla perfectamente castellano.

Nos cuenta que el nacio en Ceuta, es español, es musulman y le encanta viajar a la peninsula. Yo solo veo un compatriota más, diferente al igual que lo es un gallego de un andaluz o un extremeño de un catalan. Su acento es medio andaluz, medio marroqui, con un deje dulce y espaciado.

Comemos comida sin cerdo y sin alcohol, ya que este bar esta regentado por musulmanes y no tienen nada de esto, lo que no suponen ningun problema para nostros ya que el trato y la limpieza estan correctos, a partir de aqui la norma es de trato exquisito al extranjero.





Tomamos cafe y salimos a dar una vuelta por Ceuta, a ver la Plaza Mayor y  las murallas reales y los monumentos que la rodean. Nos llamo la atencion que hay un CENTRO GALLEGO, lo que no deberia de extrañarnos ya que hay gallegos hasta en la luna. En la oficina de turismo nos marcaron los sitios a visitar, que en su mayoria estan cerca unos de otros y tras mas o menos una hora y algo de andar dimos por finalizada nuestra visita turistica.





Caminamos hacia la zona comercial, donde proliferan las tiendas de decomisos regentadas por indios, paquitanis y magrebies. Los precios son aproximadamente similares a los de la peninsula pero sin iva, no se si merece mucho la pena, solo si eres un experto regateador.

Como es el comienzo del viaje y tienes el bolsillo lleno, recomendaria casi dejarlo para la vuelta, que ya te habras convertido en un experto regateador por marruecos y al ir la bolsa mas vacia no te imnportará pasar un rato tranquilamente regateando.

Recibimos la llamada de Santi, mi primo y Carlos, que ya se encuengtran en Tanger- Med desembarcando, pero que tienen para rato.

Partimos hacia la frontera con Ceuta. Justo un poco antes de entrar a Marruecos hay una gasolinera BP donde echamos gasolina a precio de risa, ahi si que se noto que el precio era realmente bajo respecto a la peninsula.

El panorama en la frontera es desolador. Me impresiono tanto que aun me estremezco al pensarlo. esa frontera es el fin de Europa, la puerta que hay a continuación es Africa, la frontera Marroqui se adivina a unos 100 metros, y donde del lado español se ve un edificio moderno, al otro lado el panorama es muy diferente, tipo la india, gente vagabundeando de un lado para otro esperando hacer trato de cambio de dinero o un trueque, venderte hachis, no se. Es un cambio del mundo occidental al tercer mundo y es un cambio extremo para el que no estaba preparado ni creo que nadie lo este, son las ventajas de viajar en moto en lugar de enlatado en un avion.

En la puerta de entrada a españa hay un policia que cada 10 segundos tiene que apalear a un marroqui que se quiere colar y devolverlo al otro lado. El trato no es el mas correcto ni siquiera humanitario, tambien entiendo que cuando uno tiene necesidad hace lo que sea, y ese policia es lo que pone limite.

Cruzamos con nuestras motos, el policia nos pide el pasaporte y nos mira como pensando que hacen este par de gilis en Marruecos, para nosotros una aventura, para el una rutina.

En la frontera marroqui hay una docena de individuos de aspecto sospechoso esperando por 'guiris' como nosotros para por unos centimos o un euro o lo que sea, hacernos los papeles. Estan medio confabulados con un funcionario marroqui con chilaba y una chapa y un carnet que podria ser de cualquier cosa, segun el es de responsable del gobierno marroqui pero podría ser de socio de un bingo.

Practicamente se tiran encima de nosotros, ya que somos los unicos extranjeros en la frontera al ser lunes por la tarde, para rellenarnos los papeles y salen corriendo detras de nosotros antes de que nos acerquemos al primer puesto de la frontera, donde un sudoroso funcinario marroqui nos toma nota en un educadisimo frances, que yo no hablo, de nuestros datos personales.

Carlos y yo aceptamos darles unos euros para que nos los rellenen y vamos pasando de puesto en puesto, ya que hay que dar de alta los papeles de la moto tambien.

La aduana de Marruecos es como un pequeño suburbio.
Al final terminamos en una cola en la que delante de mi hay un camionero intentando sobornar a un funcionario de aduanas medio compinchado con un policia, el cual asiente cuando el funcionario recibe algo en una mano del camionero, todo de una manera discreta pero a lo ojos de todo el mundo.

Cuando me toca a mi el funcionario mira rapidamente que los papeles estan correctos y me da paso el policia. ¡¡¡¡ Ya estamos en Marruecos ¡¡¡

Al pasar los primeros metros enfilamos por la carretera que va a Tanger-med, el puerto que quiere hacer la competencia a Algeciras. Probablemente sea la carretera mas moderna de Marruecos, dispone de dos carriles por sentido con mediana. Algunos carriles se encuentran cortados debido a los desprendimientos o argallos que decimos en Asturias. Aqui en españa en unos días se habrian reparado, aqui simplemente se ha plantado una señal de via estrecha y se ha dejado así, perfectamente señalizada pero sin arreglar, por lo que no hay que 'emocionarse' mucho.

Intentamos acoplarnos a las vias de aqui, estan en buen estado pero no hay que fiarse, ya que la gente anda como Pedro por su casa, cruzan sin mirar (por una carretera), los animales estan sueltos, la gente se sienta en los arcenes de la mediana....


Al llegar a Tanger-Med nos fascina que en un pais tan pobre hayan sido capaces de construir una infraestructura tan moderna.

Tras dar varias vueltas, ya que la señalización no es muy buena, localizamos la entrada y aparcamos las motos junto a la parada de taxis. Todos son Mercedes con no menos de 25 años, algunos con las ruedas lisas y con pinta de no haber pisado una ITV en su vida.

Los taxistas esperan dentro de los coches, algunos hasta seis o siete dentro de uno solo esperando a los clientes.

Como no vemos ni a Santi ni a Carlos aprovechamos para cambiar el dinero en una agencia oficial de cambio y tomar un cafe. la chica que me atiende va sin velo y vestida al modo occidental. Saboreo mi cafe mientras observo un retrato de Mohamed VI de unos cuatro por cuatro metros que preside el hall de la terminal de viajeros.

esta foto la hizo Carlos desde el barco, al fondo se ve TANGER-MED
Recibo un mensaje en el movil de Santi, ya han desembarcado y viene con Oriol, otro catalan que han conocido en el viaje. este habia quedado tambien con su colega en Tanger-Med para darse una vuelta por Marruecos. Nos juntamos todos en el estacionamiento de la terminal.

Preguntamos a un taxista por un alojamiento y nos indica que a unos cinco kilometros hay un alojamiento. Son las 19:30 y ya empieza nuestra aventura.

Muy prudentemente emprendemos ruta hacia el alojamiento que el taxista nos indico. En poco tiempo aparece un hotel de carretera y tras ajustar el precio del alojamiento con el dueño, unos 100 dirham, que a mi al principio me parece un robo pero que al cambio son 10 euros por dormir. vemos las habitaciones, no estan mal, en peores plazas hemos toreado, las duchas son mezcla de letrina con no se que.

Enfrente del hotel esta el mar, no se ve la costa porque ya no estamos enfrente de la peninsula. Me acuerdo de Virginia y Cesar a los que llamo y echo de menos, y me doy cuenta de lo que me echan ellos a mi.

Cenamos enfrente del hotel en un restaurante tipico. La habitación la comparto con Carlos. Me voy a la cama, demasiadas emociones y experiencias para un solo día.

Etapa 2: Algeciras-Tarifa-Ceuta

Nos levantamos pronto y desayunamos como si llevaramos toda la vida sin hacerlo.Decidimos ir a Tarifa a través de la carretera que va desde Algeciras a Tarifa, se atraviesa un pequeño puerto de montaña desde el que se va ascendiendo hacia el cielo azul y se va descendiendo de nuevo hacia el mar. Las vistas, impresionantes,muestran al fondo Africa y Ceuta, nuestro destino final para hoy.






Tan cerca..tan lejos..

Tras curvas y curvas y mas curvas empiezo a notar que la elección de las Pirelli Scorpion Trail ha sido acertada, se agarran perfectamente al asfalto, haciendo cada tumbada mas y mas intensa. me corto un poco por el peso del equipaje, no me siento seguro y no quiero estropear un viaje que a pesar de los kilometros que llevamos hecho, aun no ha comenzado.

Tras pasar el puerto y disfrutar de las vistas divisamos Tarifa y las figuras que en el mar practican windsurf.




Tras hacernos las fotos de rigor, decidinos volver a visitar Gibraltar, el día nterior nos cundio la visita.




Como se nos hace tarde, salimos de Gibraltar de regreso a Algeciras para coger el Ferry. Entramos en el puerto de Algeciras y nos dirigimos al punto de embarque de nuestro barco. Nos juntamos con un grupo de moteros alemanes, que vienen en un viaje organizado por la empresa Edelweiss, que realiza rutas en moto por todo el mundo.






Jens, un aleman casado con una limeña es el 'road leader' de la expedición, un tio simpatiquisimo y muy profesional, que nos da un monton de consejos sobre alojamientos y rutas que nosotros recibimos encantados.

El grupo de alemanes son gente de mediana edad, casi todos con BMW GS 1200 y que van a estar 15 días por Marruecos de tranquis.

Una vez visados papeles y embarque, subimos las motos al ferry. No fue una maniobra demasiado complicada, las aparcamos donde nos indicaron y con unas esligas quedan perfectamente amarradas. Tuvimos la precaución de poner un saco de dormir entre la eslinga y la moto para evitar rozaduras al carenado.








El ferry que nos toco (y creo que el resto les pasa lo mismo) no tienen zona de cubierta pero si tienen clases: primera y turista.Nos quedamos en turista y aprovechamos para echar una siesta. Al principio me daba corte quitarme las botas, pero como todos los magrebies que tenia al lado se habian quitado los zapatos, pues decidi quitarmelas.

El Ferry se desliza por el mar como un tren, no se nota ni una sola ola del mar y avanza muy rapidamente desde la peninsula a Ceuta.

Al divisar Ceuta me quede muy impresionado porques una ciudad enorme, por lo menos 10kilometros de punta a punta. Tambien se aprecia el cambio de continente, que estas en Africa, aunque Ceuta tiene el aspecto de una ciudad moderna y Europea.



Por fin llegamos al puerto de Ceuta, bajamos a la bodega del ferry a buscar las motos. Nos despedimos de los alemanes haciendo la señal del pulgar hacia arriba y deseandonos, en aleman e ingles, buen viaje.